MACHO STREET

Caminar por las calles no es lo mismo para un hombre que para una mujer. Las mujeres deben acostumbrarse desde adolescentes a caminar con cuidado ante el acoso y hostigamiento de los hombres que expresan sin reparos su “irrefrenable deseo sexual”. Diariamente a las mujeres les susurran o gritan palabras y frases denigrantes y sexistas. Incluso cuando vemos un grupo de hombres en una esquina, tenemos miedo de pasar por temor a sus agresiones. Y si nos defendemos, si respondemos, si contestamos, nos insulta, y a veces llegan a la agresión física. Hombres que no cumplen lo esperado socialmente son también víctimas de estas agresiones, y tanto o más aún son las agresiones que sufren las mujeres y hombres trans y las personas sexualmente diversas.